Gracias por apoyarnos.
Gracias por estar en el hospital desde el principio, cogiendo Aves y Alvias casi sin resuello.
Gracias por querer tanto a la idea como a la realidad de Silvia.
Gracias por envolvernos en un manto de cálida normalidad una situación que no era nada normal.
Gracias a nuestras familias y los amigos que son nuestra otra familia.