Silvia comenzó el pasado 4 de septiembre a ir a la guardería.
Al inicial miedo de que ella no anda, ni gatea – y podía sentirse cohibida -, ayer su papi me los quitó de un plumazo.
Eloy fue a la reunión de la guardería (yo no pude, el trabajo ahora me supera!), y me contó la cantidad de cosas que hacen y lo bien que se lo pasa Silvia alli.
Creo que ha sido una excelente decisión la que tomamos 🙂
A ver si el papi os cuenta lo que hace Silvia con el sirope de chocolate…